**Primero que nada gracias Clau por ese título tan inspirador, sin él esta entrada no sería posible**
Hace unos días tuvimos una de las festividades más importantes a nivel mundial. Una época de tradiciones (o imposiciones) en mi país donde aún la sociedad es un estado católico y no láico como se nos ha querido hacer creer.
Me encontraba por primera vez con un alto entusiasmo por esa fecha ya que por primera vez podría poner mis ojos sobre y formar parte de una de las tan afamadas tradiciones de mi pueblo. Según tengo entendido esta tradición es más del interior del país y la hemos adoptado acá en la capital. La tradición consiste en elaborar una preciosas alfombras con aserrin de distintos colores. Es algo muy entretenido debo decir y aún cuando suena como algo sin importancia, en primera no es fácil y en segunda es una parte muy importante del itinerario de la semana esto sin mencionar la belleza de las alfombras terminadas y el arte que cada cual pone a sus propias creaciones.
Desde temprano comenzamos a plasmar nuestro arte y con mucho entusiasmo terminamos la primera alfombra... He aquí una muestra


Seguimos... Todo iba muy bien hasta el punto donde comence a reflexionar sobre lo que estabamos haciendo. Recapitulemos... Llegamos desde muy temprano con entusiasmo a contribuir con el arte, al igual que yo miles de personas acudieron al evento con el mismo afán, ver a nuestra querida ciudad llena de hermosura. Pero que hay con el resto de la tradición? Pues una vez terminadas las alfombras son usadas para que la recreación del víacrusis pase por encima de ellas y peor aún encabezadas por la "máxima representación de la iglesia en Honduras" que no resulta ser más que un traidor a su pueblo y a la fe del país, predicador y sacerdote de las minorías enriquecidas (muchas veces de manera ilicita) y que no hace más que darle la espalda al pueblo que tanto cree en las doctrinas que su religión pregona... Fue ahí donde me dije (como cualquier amante del arte) será posible que tanto arduo trabajo se eche al caño en 10 minutos?
Lo peor llegó tras otros cuantos minutos de meditación y análisis al respecto. Fue un balde de agua fría el llegar a ver el simbolismo tras la tradición y más triste aún saber que es algo que el pueblo asimila para sus vidas... Imaginenlo: El pueblo trabaja con mucho esfuerzo, con amor, con entusiasmo, con dedicación horas tras horas a veces en las condiciones más inospitas para poder crear algo, para construir, sólo para que los "dignos funcionarios" pisoteen ese trabajo y los destruyan en minutos con una estupida sonrisa en el rostro...
Al menos, yo, como artista no puedo unirme y sentirme feliz con esta tradición tras ver como se insulta el trabajo del pueblo y sobre todo el arte... es por ello que invito a todos a no participar de tradiciones que van en contra del enaltecimiento del pueblo.
Vivimos en la desgracia de ser una sociedad donde el futbol y la religión es el opio con el que se nos mantiene estupidos. Levantemos la cabeza y miremos más allá de nuestras narices, desechemos todo aquello que no permite el progreso y que es exucsa para algunos de los peores crimenes en todo el mundo, entre ello y sobre todo, las religiones (MÁS NUNCA LA ESPIRITUALIDAD) que sólo buscan mantener al pueblo cautivo con mentiras, miedo y amenazas de vivir conenados en un infierno por toda la eternidad cuando el verdadero infierno ya lo estamos viviendo en esta vida sobre esta tierra.
Al fin de cuentas no hacemos de menos la belleza estética de la tradición pero lo que existe en su trasfondo me deja con un amargo sabor de boca...
Les dejo un par de fotos más de las que ya estaban completas...


El resto de las fotos en este Albúm
Me encontraba por primera vez con un alto entusiasmo por esa fecha ya que por primera vez podría poner mis ojos sobre y formar parte de una de las tan afamadas tradiciones de mi pueblo. Según tengo entendido esta tradición es más del interior del país y la hemos adoptado acá en la capital. La tradición consiste en elaborar una preciosas alfombras con aserrin de distintos colores. Es algo muy entretenido debo decir y aún cuando suena como algo sin importancia, en primera no es fácil y en segunda es una parte muy importante del itinerario de la semana esto sin mencionar la belleza de las alfombras terminadas y el arte que cada cual pone a sus propias creaciones.
Desde temprano comenzamos a plasmar nuestro arte y con mucho entusiasmo terminamos la primera alfombra... He aquí una muestra


Seguimos... Todo iba muy bien hasta el punto donde comence a reflexionar sobre lo que estabamos haciendo. Recapitulemos... Llegamos desde muy temprano con entusiasmo a contribuir con el arte, al igual que yo miles de personas acudieron al evento con el mismo afán, ver a nuestra querida ciudad llena de hermosura. Pero que hay con el resto de la tradición? Pues una vez terminadas las alfombras son usadas para que la recreación del víacrusis pase por encima de ellas y peor aún encabezadas por la "máxima representación de la iglesia en Honduras" que no resulta ser más que un traidor a su pueblo y a la fe del país, predicador y sacerdote de las minorías enriquecidas (muchas veces de manera ilicita) y que no hace más que darle la espalda al pueblo que tanto cree en las doctrinas que su religión pregona... Fue ahí donde me dije (como cualquier amante del arte) será posible que tanto arduo trabajo se eche al caño en 10 minutos?
Lo peor llegó tras otros cuantos minutos de meditación y análisis al respecto. Fue un balde de agua fría el llegar a ver el simbolismo tras la tradición y más triste aún saber que es algo que el pueblo asimila para sus vidas... Imaginenlo: El pueblo trabaja con mucho esfuerzo, con amor, con entusiasmo, con dedicación horas tras horas a veces en las condiciones más inospitas para poder crear algo, para construir, sólo para que los "dignos funcionarios" pisoteen ese trabajo y los destruyan en minutos con una estupida sonrisa en el rostro...
Al menos, yo, como artista no puedo unirme y sentirme feliz con esta tradición tras ver como se insulta el trabajo del pueblo y sobre todo el arte... es por ello que invito a todos a no participar de tradiciones que van en contra del enaltecimiento del pueblo.
Vivimos en la desgracia de ser una sociedad donde el futbol y la religión es el opio con el que se nos mantiene estupidos. Levantemos la cabeza y miremos más allá de nuestras narices, desechemos todo aquello que no permite el progreso y que es exucsa para algunos de los peores crimenes en todo el mundo, entre ello y sobre todo, las religiones (MÁS NUNCA LA ESPIRITUALIDAD) que sólo buscan mantener al pueblo cautivo con mentiras, miedo y amenazas de vivir conenados en un infierno por toda la eternidad cuando el verdadero infierno ya lo estamos viviendo en esta vida sobre esta tierra.
Al fin de cuentas no hacemos de menos la belleza estética de la tradición pero lo que existe en su trasfondo me deja con un amargo sabor de boca...
Les dejo un par de fotos más de las que ya estaban completas...


El resto de las fotos en este Albúm
2 comentarios:
OH gracias por los creditos del Titulo... Sinceramente tu escrito me identifica...es inevitable el amrgo sabor de boca por lo sucedido, pero muy dentro hay una satisfaccion de lo motivador que resulta la actividad, claro siendo inoscentes como muchos lastimosamente ahora la inoscencia deberá ser un valor y no una cualidad pura de cada ser Humano.
Claro que si... la actividad como arte es bellisima aunque su simbolismo es aterrador y hace que el pueblo quede sumido en la desgracia y a merced de los mismos de siempre...
Gracias por el comentario. Besos Clau!
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